¿Quieres conocer los detalles del Cartel del 250 Aniversario de nuestra Cofradía?
Muchas sois las personas que os habéis interesado en conocer más profundamente el por qué de cada elemento que aparece en dicha imagen, siendo conscientes además de que en nuestra Cofradía, nada se deja al azar y todo tiene un significado concreto.
Os diremos que el Cartel está diseñado y realizado por D. JESÚS ZURITA VILLA, natural de El Carpio y licenciado en Bellas Artes por la rama de Restauración y Pintura, en la Universidad de Sevilla.
A buen seguro os sonará este nombre, puesto que junto con el también carpeño D. JOSÉ ANTONIO GAVILÁN LEÓN y a través de su empresa "ARCADIA", ha formado parte de los trabajos de creación de la talla del Ángel Mancebo que hemos estrenado este año, al igual que del resto de trabajos de modelado, estucado, embolado y dorado en las tallas de las andas de la Cofradía.
Tenemos la inmensa fortuna de que el propio D. JESÚS ZURITA VILLA haya querido redactar para nosotros este artículo, del que os hacemos partícipes, para que conozcáis en profundidad los motivos del diseño.
Entendemos que cualquier obra de arte es más fácil entenderla si es contada por el propio autor, y por ello mismo, os dejamos con las propias palabras que dedicó a la Cofradía en la presentación de su Cartel.
"Queridos hermanos, os saludo con la cercanía en el trato que se dibuja por la razón de simetría en la que nos encontramos, todos nosotros buscamos, y encontramos, a Dios en la silueta morada de un hombre que carga con una cruz.
Os agradezco el ofrecimiento que me hicisteis para dibujar el cartel conmemorativo del 250 aniversario de la erección canónica de la Cofradía, me uno a vosotros en el júbilo de la celebración de esta efeméride, y me siento sinceramente orgulloso de tener la posibilidad de participar con esta pequeña aportación, que quiere ser signo tangible de la relación de amistad fraterna que une a dos artífices de El Carpio con la buena gente del Nazareno de Encinas Reales.
Mi trabajo plástico, desde hace ya bastantes años, gira en torno al concepto del tiempo, a la paradoja que forman lo efímero y lo eterno.
El cartel es una intervención con grafito y témpera sobre papel decimonónico. Me gusta dibujar sobre papeles antiguos, porque busco indagar en este soporte con la pretensión de hallar resquicios que evoquen historias pasadas, considerándolos contenedores de memoria; intento palpar y contactar con lo pasado, persiguiendo la representación de lo eterno, que es aquello que está extraído del tiempo.
He querido representar, en un primer término y ocupando la zona central, la silueta frontal de la actual Imagen de Jesús Nazareno junto con la valiosa Imagen que anteriormente procesionaba. Pienso en la idea de que vuestro pueblo ha ido construyendo, a golpe de siglo, sobre el Nombre del Nazareno, el rostro de Dios, que lleva en su piel marcada, de manera indeleble, la devoción acumulada a través del tiempo.
En el cartel aparecen mariposas, símbolo de la Fe sin medida, la que vosotros demostráis con el esfuerzo y el trabajo continuo; se dice que las mariposas se enamoran de la Luz, hasta el punto de ser incapaces de alejarse de ella, aunque esto suponga terminar perdiendo la vida.
También he querido colocar unos claveles, como símbolo de las promesas que acumula el Señor sobre su espalda, pero también como signo de la voluntad de aliviarle su sufrimiento con las ofrendas que se le hacen, con los claveles que se colocan a su paso para que sus pies desnudos no toquen el suelo.
Pero quizás el elemento clave del cartel sean las cruces, las nuestras, las que forman parte de vuestro escudo, las que el Señor nos dice cómo se llevan.
La principal diferencia entra las Imágenes que representan a Jesús Nazareno y las que se refieren a otros pasajes de la Pasión es la actitud andante, la voluntad de movimiento que siempre tienen, por eso mismo que se conmemoren dos siglos y medio de historia documentada de la Hermandad tiene que servir para seguir caminando siempre de frente, para no rendirse nunca, para seguir siendo historia viva y no historia pasada.
Precisamente por ello he querido expresar el cartel con un lenguaje plástico contemporáneo, porque nuestra devoción no es algo pasado de moda, ni una reliquia intocable, es una manera de entender la vida, simbolizada en los elementos vegetales del cartel, en continuo florecimiento, para que siempre sea posible encontrar en el paso valiente del Nazareno un punto de encuentro entre el poder de Dios y la devoción de los hombres.
Muchas gracias."
JESÚS ZURITA VILLA
